domingo, 12 de diciembre de 2010

La Catedral de San José 1858

Esta es una de las imágenes publicadas en el Harper´s Weekly (En realidad el New Monthly Magazine) en 1860 que ilustra el relato de Francis Meagher sobre su viaje a Costa Rica. Meagher, un nacionalista irlandés naturalizado estadounidense, realizó un viaje a Costa Rica en 1858 con el fin de investigar sobre la factibilidad de crear una colonia irlandesa en dicha nación. Debido al momento de su llegada, sus observaciones son una importante fuente para reconstruir la comprender la sociedad costarricense de mediados del S XIX. Su estilo ameno brinda una graciosa descripción del templo, que sorprendía por su sencillez. El edificio actual es el resultado de una serie de modificaciones hechas por José Quirce en 1871. fuente: Ricardo Fernández Guardia. Costa Rica en el S XIX, EUNA, 1984.


El Gótico

Se le suele llamar Gótico a una serie de lenguajes plásticos que surgieron durante los últimos años de la Edad Media e incios del Renacimiento en Europa Occidental. Este mote fue creado por los teóricos italo renacentistas que lo consideraban como un estilo bárbaro proveniente de la actual Alemania. Sinembargo, la mayoría de los historiadores coinciden en que su origen se encuentra en las últimas derivaciones del Románico Normando y del noreste francés.
 Los primeros ejemplos se produjeron en la zona que rodea París, conocida como la Île de France. En la construcción de las primeras abadías y edificaciones de este estilo, fue fundamental la participación de la monarquía que se imponía como institución sobre las estructuras feudales preexistentes. Por ejemplo, uno de los primeros casos fue la remodelación Abadía de Saint Denis, efectuada en1140. Su función de panteón real confirma la relevancia de los soberanos franceses en la generación de este lenguaje tardomedieval.
Otro factor que facilitó la construcción de ambiciosos edificios góticos fue la reaparición de la vida urbana y la consolidación de la burguesía como una nueva capa social. La difusión del estilo fue amplia y se extendió hasta Rumanía al Este y el Caribe al Oeste (Catedral de Santo Domingo). Cada región generó sus variantes estilísticas y conceptuales, en cuyas versiones fueron fundamentales las tradiciones plásticas locales.

En el Gótico se encuentran continuidades y rupturas con las tradiciones artísticas medievales precedentes. Como continuidades figuran la fascinación por los valores sensoriales: policromías, texturas, dorados, pedrerías; y como rupturas se encuentran el énfasis en la luminosidad de los interiores arquitectónicos y la mayor ligereza y elegancia de su diseño. En el campo de la escultura y la pintura es evidente una creciente búsqueda del naturalismo. Por otra parte, uno de los logros más sobresalientes de este período son los vitrales, cuyas dimensiones fueron posibles gracias al empleo del arco ojival y la nervadura que permitieron vaciar los muros de los edificios, convirtiéndolos en esqueletos pétreos.